Reseña Full Void: cuando lo retro aún causa emoción.

Uno de los primeros videojuegos que jugué, desde que tengo memoria, fue Príncipe de Persia, allá en la época del DOS. Era un juego realmente sencillo, sin mucho nivel gráfico (claro, la tecnología naciente de esos momentos no permitía algo mejor), pero contaba una historia y era entretenido. El tiempo fue pasando, el apartado visual mejoró y la forma de contar historias se hizo mucho más compleja y elaborada. Cada vez es más sencillo expresarse y hacer que los demás entiendan y vivan esa expresión.

Pero, lograr que el jugador recorra una historia y sienta las emociones que ella proporciona no siempre se logra de la mejor manera y si se intenta realizar, con un apartado gráfico más sencillo y solo enfocándose en las mecánicas y en la interacción, se convierte en un reto y en una ardua tarea.

Full Void es un juego tipo plataforma, creado en pixel art y 2D y desarrollado por OutOfTheBit Limited para PC. Maneja mecánicas simples, pues cuenta con movimientos laterales, salto y una acción de interactuar; dicho esto la curva de aprendizaje de sus controles es rápida y no requiere de repetición constante ni de prueba y error.

La temática gira entorno a un mundo cuasi que post apocalíptico en donde se nos muestra que los robots han dominado a la humanidad y acabado casi que con la gran mayoría de ella. De hecho, no veremos ni un solo adulto a lo largo del juego, más allá de algunos recuerdos del protagonista al llegar a algunos lugares. Nuestro objetivo será el de lograr detener esta creciente actividad robot y liberar a lo que queda de la raza humana (o al menos eso fue lo que percibí jejeje).

Uno de los elementos con el que tuve emociones encontradas fue precisamente la historia y digo que “encontradas” simplemente por que me hubiera gustado tener más pistas o indicios más sólidos de lo que había sucedido en el trasfondo del juego. Hay algunas veces en las que se nos muestran ciertos elementos con los que podemos armar dicha historia y ciertos “secretos” que la harán más clara. A pesar de ello siento que de manera sencilla intentaron contar lo que querían (casi lográndolo), sin tantos giros, drama y abrumadoras adiciones. Es un plan perfecto para una noche lluviosa, escuchando música y comiendo unas empanaditas con ají (eso sí, lavarse muy bien las manos antes de volver a tocar el teclado).

La parte gráfica me encantó. El estilo es prolijo a pesar de lo sencillo, quitando algunas cinemáticas en donde siento que el arte hubiera podido ser mejor (se nota que los detalles aumentan en los elementos que quieren se enfoque más el jugador). Las animaciones son fluidas aunque creo que el personaje al correr parece ir más lento de lo que debería. La paleta de colores estuvo increíble, siendo una específica para cada uno de los niveles en los que nuestro personaje avanza.

Pero, algo aparte del arte y de los movimientos del jugador debe hacer que el jugador se entretenga ¿no? Pues aquí es donde llegan los acertijos. Los “rompecabezas” que tenemos en Full Void son varios y necesitaremos usar bastante nuestra cabeza en algunos de ellos (si, lo acepto, tuve que ver un gameplay de internet para solucionar uno… no me juzguen, me irrito fácilmente :v). En algunos casos tendremos que dirigir a un pequeño robot para que nos ayude a alcanzar elementos a la distancia (él se puede mover lateralmente, subir y bajar con un gancho, interactuar con los objetos y, más adelante en el juego, fundirse momentáneamente con elementos tecnológicos del entorno) y en otros mover unas grúas para llegar a lugares alejados (estas, a diferencia del robot, solo se pueden mover hacia arriba, abajo y hacia los lados); estas acciones estarán guiadas por una grilla que se dibuja en el fondo, ayudándonos con los conteos de movimiento. Otros acertijos incluyen recorrer laberintos con fuego y palancas, presionar botones contrarreloj, “hackear” uno que otro sistema y tocar el piano… así es, cuando lleguen ahí se acordarán de mi. La verdad me gustaron estos pequeños retos e hicieron más interesante la aventura.

La parte sonora fue simple, manteniendo sonido ambiente en ciertos momentos y algunas melodías en situaciones de acción

Pro tip: siempre revisen muy bien el entorno, ya que la clave puede estar en él.

Otro apartado a destacar fue la interactividad con las cinemáticas; aparte de que son variadas y diferentes dependiendo de la situación (por ejemplo si nos quemamos, electrocutamos o caemos), en algunas de ellas deberemos presionar el control de acción para que podamos avanzar ya que si no, es posible que gritemos “AQUÍ NO SE PUEDE HACER NADA, DEBE SER UN BUG” (no es que me haya sucedido, guiño, guiño) quedando así:

Para finalizar quiero también destacar un hecho que se muestra ya en los créditos del juego y es que la dedicación del juego estuvo relacionada a un hecho en particular que vivió el mundo y que sin duda marcó muchos hogares de familia. No lo mencione directamente aquí para que se animen a jugar a Full Void, así que ¿qué esperan?

Full Void es un juego sencillo, divertido y que tiene una duración de un poco más de 3 horas. Su historia logra enganchar aunque siento que le faltan un poco más de recursos para que el jugador la entienda y disfrute más. El recorrido es agradable, con buenos acertijos, mecánicas y animaciones (estas me siguen recordando mucho al Príncipe de Persia). Es en general un buen título para pasar una agradable velada de videojuegos; es por esto que, aquí en lavidaesunvideojuego.com le damos una calificación de…

No se les olvide que el juego se encuentra disponible en Steam y le pueden dar una revisada siguiendo este enlace,

@croatoan9 sorry, but the princess is in another castle.

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