Siempre es importante atrevernos a dar un paso al lado y alejarnos de vez en cuando de las megaproducciones, pues como he dicho antes: no solo del AAA vive el gamer. Siguiendo este precepto me lancé hacia una nueva aventura de la mano de Midgar Studio, una desarrolladora francesa que pretende llevarnos a un nuevo y basto mundo, en donde la magia y la tecnología se unen para ofrecernos una fantástica historia, un título lanzado por Dear Villagers para Xbox Series X/S y One, PlayStation 4 y 5, Nintendo Switch y Microsoft Windows. Sin más preámbulos, hoy La Vida es un Videojuego te trae la reseña de Edge of Eternity.

Heryon, un continente vivo
Empieza la historia y de entrada notamos un cargue algo retrasado en las texturas, pero que por ahora no es demasiado notorio a medida que avanza la cinemática de inicio, al poco tiempo nos encontramos con Daryon, nuestro apuesto protagonista y el cual se ve de forma increíble. A partir de aquí inicia un acabose: los personajes secundarios se ven terribles, excesivamente acartonados, con una sincronización de labios nula (y eso si mueven la boca), con una actuación de voz que le quita dramatismo a los primeros pasos, los cuales son muy importantes, ya que, buscan darle un camino del héroe a Daryon, haciendo que estos se sientan más como tropiezos, a pesar de que el juego vuelva a agarrar ritmo luego de la primera hora.

Bueno, ya me desahogué, ahora centrando un poco las ideas es importante resaltar que los escenarios se ven increíbles, especialmente porque Edge of Eternity maneja diferentes climas e iluminaciones a medida que cambia el tiempo dentro de la aventura, haciendo que el continente de Heryon se sienta vivo. Conjuntamente, los dos protagonistas principales, los gemelos Daryon y Selene, se ven geniales, con animaciones especiales para sus cabellos, un hermoso rostro y vestimenta con bastante detalle. Igualmente, la música es extremadamente bella, pues es compuesta por Cédric Menendez y Yasunori Mitsuda, este último conocido por trabajar en clásicos como Final Fantasy, Chrono Trigger o Xenoblade; el resultado es una sensibilidad armoniosa en todo el juego, resaltando el dramatismo y la epicidad de los combates.


Por otro lado, todos los personajes secundarios y NPC se ven terriblemente animados, no hay uno que se salve, ni siquiera los cercanos a nuestros protagonistas; amigos e intereses amorosos se pierden en la baja calidad de detalles y animación, además que el diseño de los mismos es demasiado repetitivo. También es importante resaltar que, si bien los escenarios están muy bien trabajados, hay texturas que no cargan de forma adecuada, apareciendo arboles de la nada o cambiando incluso el color de piel de ciertos NPC cuando los vemos desde lejos y empezamos a acercarnos. Entonces quedamos frente a un juego que parece prometer demasiado, pero se queda atrás en aspectos gráficos muy importantes.
Una jugabilidad amalgámica
Ahora miremos el apartado de jugabilidad, aquí es importante aclarar que Edge of Eternity es un RPG puro y duro, ha tomado influencias de muchos juegos y ha logrado mezclarlas de forma muy natural, haciendo que no se sienta abrumador el aprendizaje de las mecánicas del juego, sino por el contrario, nos resulten familiares. Empecemos entonces, el modo de combate es por turnos y los personajes actuarán cuando se llene la barra de acción, una vez suceda, seleccionamos que haremos, si atacar, usar un hechizo, lanzar un objeto o (atención a esto) movernos; así es, si bien el combate usando barras de acción recuerda a algunas entregas de Final Fantasy, aquí se añade la posibilidad de movernos por un escenario marcado en el suelo por hexágonos (nexos), agregándole a las batallas un nivel más de estrategia, pues nuestra espalda o la de los enemigos representan golpes críticos, además, hay hechizos que requieren un tiempo de lanzamiento, el cual puede ser interrumpido por un ataque básico, por lo tanto, mantén a tu mago protegido y a tu guerrero frente a los rivales.


Otro punto importante en Edge of Eternity es la exploración; el juego se desarrolla en un mundo abierto, recorriendo todo tipo de biomas y enfrentando a toda clase de enemigos, para hacerlo disponemos de una barra de energía, que se gasta muy lentamente con el tiempo o cuando uno de nuestros héroes cae en batalla, si esta llega al 25% recibiremos una penalización en la experiencia recogida. Por tal razón, es importante recargarla en fogatas o posadas, en estas últimas podremos acceder a conversaciones entre los miembros del equipo que les darán profundidad a sus historias, sus intenciones y sus anhelos, además que podremos comer alimentos que nos proporcionarán beneficios en combate.


Es pertinente mencionar que las habilidades recordarán a Final Fantasy VII y las materias, pues en este caso, las armas cuentan con ranuras para poner cristales, estos cristales afectarán nuestras estadísticas y agregarán habilidades a nuestro menú de hechizos. Cada arma cuenta con una disposición de cristales específica y cada color tiende a tener cierta afinidad por x o y elemento. Entonces, es de vital importancia subir el nivel de nuestras armas para así equipar todos los cristales posibles, ganando en el proceso habilidades y estadísticas.

Igualmente, podemos coleccionar objetos varios que nos permitirán craftear todo tipo de cosas, desde consumibles, como pociones, hasta nuestro equipo, como armas y armaduras. Estos implementos se pueden conseguir matando enemigos o completando misiones secundarias y cazas (ubicadas en un tablón de encargos). También se dispone de una zona llamada el Tabernáculo, en donde se reúnen viajeros que buscan asignarte misiones temporales y de ejecución rápida. Todas estas herramientas mencionadas nos permiten subir de nivel rápidamente, debido a que con las peleas casuales resulta un poco dispendioso.

Una aventura prometedora
La historia de Edge of Eternity empieza arrancándonos la esperanza, se nos pone en un mundo consumido por la guerra entre los habitantes en Heryon y una raza alienígena conocida por el nombre de los Arquelitas. Por si fuera poco, entre la población se expande una extraña enfermedad llamada (COVID-19) la Corrosión, una sentencia de muerte dolorosa para quien la padece. Los jóvenes son reclutados para ir al frente, los desertores son ejecutados, la iglesia (conocida como el Sanctorium) gobierna con mano de hierro y declara herejes a sus feligreses ante la menor ofensa. En ese contexto, nuestros héroes principales, Daryon y Selene (aunque se irán incorporando más) buscan una cura en contra de la Corrosión, pues la madre de ambos la padece, a medida que se generan intrigas y traiciones entre ambos bandos en guerra, que cambiarán para siempre el destino de nuestros protagonistas.


Con esta trama de fondo tendremos horas y horas de juego, además, bien sabemos que los RPG tienden alargarse por la gran cantidad de cosas extras que puedes hacer. Entonces, entre misiones principales, secundarias, cazas, favores y el mismo grindeo para subir de nivel se pasará el tiempo. Profundizando este punto, la jugabilidad no solo nos recordará a los clásicos ya mencionados, sino también a los MMORPG como World of Warcraft, en donde tendremos que matar a los cinco jabalíes o recoger las diez florecitas para que te den acceso a las misiones que valen la pena. Por lo tanto, en varias partes el juego se volverá muy repetitivo, aunque son mecánicas (que igual no nos gustan) a las que los amantes del RPG estamos acostumbrados.

Edge of Eternity es una carta de amor de Midgar Studio a todos esos juegos llenos de magia que nos hemos encontrado en cada generación, a los fanáticos de este género. En consecuencia, es un juego muy prometedor, y ese es el problema, pues se queda en promesas, ya que, a pesar de que la historia es atrapante y las mecánicas nos resultan familiares, el estudio fue demasiado ambicioso, colgándose bastante en el apartado gráfico, entonces no queda sino esperar que el equipo de desarrollo le siga metiendo amor al título, arreglando esos detalles que afectan tanto la experiencia. Destacar también que, en PS5 se reducen sustancialmente los tiempos de carga y mejoran los detalles en los escenarios, además que también se aprovecha el uso de los gatillos adaptativos y la vibración háptica.

Hasta aquí la reseña, antes de irte a salvar Heryon respóndeme, ¿has probado este título? ¿A qué otros títulos te recuerda Edge of Eternity? ¿Hiciste clic con Selene o Daryion? Déjame tus respuestas aquí abajo en los comentarios o en Facebook, Twitter e Instagram.
Calachoowie te dice, see you space cowboy…
Nota del editor: Esta reseña fue elaborada gracias a un código suministrado por Dear Villagers de Edge of Eternity.
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