Final Fantasy VII Rebirth, la reinvención de un viaje épico

Han pasado más de 25 años desde el otrora lanzamiento de Final Fantasy VII en la PlayStation 1, el que se convirtió en una revolución para la franquicia en su época. En pleno 2024, ya se cumplen 4 años desde que se lanzó la primera parte del remake para PlayStation 4. Así que la ansiedad no se hizo esperar desde que fue anunciada la portentosa continuación del título, el cual ahora resulta difícil imaginar sin las capas de profundidad que le han añadido en torno a la jugabilidad y a la historia original, pues, debo decir que el hype fue mucho más grande de lo esperado cuando pude probar el juego por adelantado gracias a Square-Enix. Sin más preámbulos, La Vida es un Videojuego te trae las primeras impresiones de Final Fantasy VII Rebirth.

La majestuosidad de Gaia

Cuando terminábamos la primera parte y Aerith mencionaba que nos aguardaba «una libertad infinita y aterradora» se refería precisamente a lo que nos ofrece Rebirth después de un par de horas de juego; nuestros héroes han salido de Midgar y ante nuestros ojos estalla un universo vibrante y precioso en todos los aspectos. Final Fantasy VII Rebirth da el paso que hacía falta y nos brinda un mundo abierto por zonas, con la posibilidad de explorar cada precioso rincón de ese planeta, donde la magia y la tecnología se unen sin parangón.

El apartado gráfico de Final Fantasy pocas veces tiene rival y esta entrega no iba a ser la excepción. Absolutamente todo se ve bellísimo, el modelado de personajes, el detalle de sus vestimentas, rostros y sus cabellos, el plumaje de los chocobos o hasta el pelaje de Nanaki; sucede de igual forma con los escenarios, el agua se ve realista (aunque esta curiosamente no moja, detalle raro y feo), las praderas exuberantes, las montañas imponentes y las construcciones alcanzan un gran nivel de detalle, sumado a que, los objetos que se aprecian en las lejanías hacen que el mundo se vea enorme, resolviendo el problema de la primera entrega en que las barriadas desde la parte superior de Midgar se veían terribles (aún no superamos la textura de la puerta).

Sucede lo mismo con el apartado sonoro, la actuación de voz es excelente y se mezcla con la estupenda animación que tienen los personajes, lo que le da vida y personalidad los héroes y antagonistas. En cuanto a la música, repiten para esta entrega Masashi Hamauzu y Mitsuto Suzuki, los cuales han trabajado en la franquicia desde hace varios años y tomaron la influencia de Nobuo Uematsu en los temas más representativos de Final Fantasy VII, agregando varios que nos llevan a través de emociones como la algarabía, la epicidad y la tristeza.

Nuevas mecánicas sin dejar la esencia

No puedo detenerme a realizar una reseña desde ceros, sabiendo que Rebirth retoma muchas mecánicas de la primera parte, por lo tanto, voy a pasar de las que ya fueron explicadas en la reseña de Final Fantasy VII Remake y me centraré en las nuevas características de este juego; entendiendo que, como buen gamer, no habrás saltado directamente a este título sin jugar primero el anterior (*ojos juzgadores).

En primera instancia tenemos la implementación de las Técnicas Sinergizadas, estas no consumen nuestra barra de BTC y nos permiten realizar diferentes acciones en combate, que ayudarán precisamente a rellenar más rápido nuestro BTC. Estas se dividen entre ofensivas y defensivas, y cambian según el trío de personajes que estemos usando, además, a medida que progreses podrás aprender varias.

Conjuntamente, se agregaron Habilidades Sinergizadas, estas son mucho más poderosas que las técnicas y recuerdan a los Límites, solo que, funcionan combinando las habilidades de dos personajes, para realizar un buen ataque que inflija mucho daño, incremente la presión y el aturdimiento sobre los enemigos, aumente la cantidad máxima de barras de BTC o mejore el nivel de los Límites, la elección es tuya.

Por otro lado, la personalización en el progreso de nuestros protagonistas cambia con respecto a la entrega anterior, antes se tenía acceso a un menú para ver el núcleo de nuestras armas, aquí subíamos estadísticas y habilidades. Ahora en este apartado solo se podrán poner habilidades pasivas propias de cada arma y cuyas ranuras irán aumentando de a pocos cuando nos hacemos más fuertes. No obstante, se agregaron los cuadernillos, que sirven para representar este progreso y son una interfaz en la cual puedes asignar todo lo mencionado anteriormente, usando puntos de acción (PA), que se obtienen cuando subes de nivel o consigues manuales de combate. No sobra mencionar que, solo se puede acceder a este menú en las ciudades y lugares de reposo, pues se encuentra en la tienda de libros Maghnata; la cantidad de habilidades a desbloquear dependerá de tu nivel de grupo y de tus PA.

Mundo abierto = exploración

Como todo juego de mundo abierto la exploración es parte vital de la aventura, en consecuencia, debemos completar las diferentes misiones principales y secundarias que veamos a lo largo y ancho del mapa: que la niña quiere reunir flores en un barrio peligroso, te toca; que hay monstruos a las afueras del gimnasio, te toca; que se perdieron los materiales de remodelación, te toca; y así en todas las regiones del mundo. Aunque al hacerlo, aumentarás tus lazos de amistad con algún miembro del grupo, esto llevará a que cambien partes de la historia según qué tan fuertes sean estas relaciones.

La exploración no sería total si no recolectas recursos en tu andar, pues Rebirth cuenta con un Transmutador de Objetos, que te permitirá fabricar desde pociones hasta accesorios y equipamiento para tus personajes. Este transmutador irá subiendo de nivel a medida que creas nuevos objetos, adquiriendo experiencia con cada receta elaborada y funcionando con todas las cosas que puedas encontrar cuando sales a explorar.

Y para hacer más sencillo este trasegar, cuentas con la clásica montura de Final Fantasy, un chocobo, que te llevará velozmente a donde necesites y cuyas habilidades cambian de acuerdo a las exigencias de la región en la que te encuentres. No olvides que explorar un nuevo lugar también te desbloquea nuevos puntos de viaje rápido, acelerando la consecución de misiones en los lugares que ya hayas visitado.

Todopoderoso Chadley

Chadley, el que nos otorgaba las materias de invocación en el primer juego a través de los simuladores, reaparece en esta entrega y es básicamente quien hila gran parte de las actividades a realizar en todas las regiones y su evidente exploración. En primer lugar, de nuevo nos ofrecerá combates virtuales, entre estos están las batallas contra invocaciones y se podrán facilitar si encuentras los santuarios de dicha invocación, potenciando a su vez el nivel de la materia cuando la consigas, además de desbloquear nuevas peleas y otorgar diferentes recompensas.

En segundo lugar, están las atalayas, digo, Torres Remnaondas, que develan puntos de interés cercanos en el mapa (como las atalayas). En tercer lugar, podrás perseguir lechuzas de manantial, las cuales te llevarán directo a Manantiales de mako, su hábitat natural, que una vez analizados revelan detalles de la historia de la región en la que te encuentres. En cuarto lugar, están las asignaciones de combate, en donde enfrentarás a versiones más fuertes de ciertos enemigos y deberás completar algunos requerimientos para obtener todos los puntos. Finalmente, participarás en la recuperación de protorreliquias, estas son artefactos antiguos y conseguirlas te irá revelando parte de una trama oculta algo irrisoria. Todas estas actividades te darán puntos que puedes canjear con Chadley por materias más poderosas de lo común.

Minijuegos

Otro elemento muy importante en Rebirth es la cantidad ingente de minijuegos; hay demasiados y la mejor parte es que no es algo malo, de hecho, casi todos ellos están implementados en medio de la historia y se disfrutan mientras avanzamos por la trama. Por lo que aparecen de forma natural y rompen con la rutina típica de los RPG que consiste es salir del pueblo, avanzar y llegar al siguiente a reabastecerte.  Por ende, voy a mencionar unos pocos, ya que, escribirlos todos da para otra reseña completa.

  • Sangre de reina: Empezando por un nuevo juego de cartas, que nos hace recordar que FF VIII y IX tenían sus respectivos Triple Triad y Tetra Master. Aquí el turno es para Sangre de Reina (Queen’s Blood), un juego muy sencillo de cartas coleccionables que será el núcleo de varias misiones secundarias.
  • Ejecución de piano: Tal como Ellie tocando guitarra en The Last of Us: Parte II, el turno aquí es para Cloud y Tifa, quienes, usando la misma mecánica de los análogos, pueden interpretar diferentes canciones de piano.
  • Fuerte cóndor: Minijuego que se retoma del Intergrade, solo que, en esta ocasión, Tifa, Cloud y Barret pueden desplegarse a través del campo de batalla.
  • Emporios Moogle: En estos debes ayudar a los moguritos a través de un pequeño minijuego, abriendo la respectiva tienda de la región y con los que es posible comerciar con medallas Moogle, ofreciéndote mercancía de la más variada.
  • Carrera Salvaje: Controlando a Red XIII, debes anotar goles en las porterías de los contrarios, los cuales serán otros animales como perros y chocobos.

Grandeza en todos los sentidos

Final Fantasy VII Rebirth es la continuación directa de los eventos evidenciados en Intergrade, y relata la historia desde que nuestro equipo llega al pueblo de Kalm, en su búsqueda por detener a Sephiroth. Empero hay algunos cambios con respecto a la entrega original que vale la pena evidenciar de primera mano y que te dejarán boquiabierto.

Rebirth consigue superar la primera parte en todos los aspectos, ofreciéndonos un combate con más mecánicas y opciones, sin alejarse demasiado de su predecesor, sin olvidar que se han unido a la aventura personajes que extrañábamos en demasía y cuyos modos de pelea le otorgan un gran aire al juego. También tiene una trama más divertida y más graciosa, sin dejar de ser más profunda y más madura.

Asimismo, posee un apartado artístico a la altura de la nueva generación, con música hermosa en todas las proporciones, que acompañan un aspecto visual potente y detallado. Es por todo eso que, con cientos de horas a la espera para ser terminado, es un juego que, seguramente, no tenga muchos fuertes competidores este año en su género y que desde ya empezó a convertirse en un clásico para los amantes de la saga.

Hasta aquí la reseña, antes de irte a detener a Sephiroth, respóndeme, ¿ya probaste este título?, ¿qué te ha parecido el Fan Service en Costal del Sol?, ¿amas a Cait Sith tanto como yo? Déjame tus respuestas aquí abajo en los comentarios o en Facebook, X e Instagram.

Calachoowie te dice, see you space cowboy…

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